El día más maravilloso es cuando se cumpla un sueño
que deseamos o lograr algo importante
con éxito, así que como te has dado cuenta, todos parece
que dependemos de ese sueño, ese logro importante
para tener un día maravilloso.
¿Qué pasaría si ese día maravilloso no dependiera
de esos pocos momentos casi inalcanzables?
Qué pasaría si un día maravilloso dependiera de
nosotros mismos,
de nuestra actitud hacia la vida, de lo que sentimos.
Todo sería mejor, si nos regalamos un momento dentro de
nuestro ocupado horario y meditáramos en silencio lo siguiente:
«me siento de maravilla» porque hoy es otro día y puedo ver, tengo
la habilidad de amar, de jugar, de soñar, tengo muchos
otros talentos y virtudes que hacen de mi día, el día más maravilloso.
Si tu día depende de 1 o 2 días inciertos, entonces, posiblemente
si ese día o días nunca llega, posiblemente tu frustración
sería terrible y quizás terminarías cometiendo locuras.
Si cada día fuese maravilloso, no tendrías que esperar con ansias.
Los días de felicidad y alegría dependen de ti.
Tú controlas tus días con una sonrisa, con entusiasmo, con fe, con un
«yo puedo ser feliz», en fin, con todo eso que te da fuerza
y te llena de energía, puedes lograr un día maravilloso.
Autor:Bacilio Emmanuel
miércoles, 9 de noviembre de 2011
Un día maravilloso
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