Ser una mujer auténtica
es una labor de equilibrio:
hay que ser digna,
pero no orgullosa;
ser dulce,
pero no abrumar a los demás;
ser capaz de observar atentamente
sin llegar a ser indiscreta;
ser capaz de reírse sin burlarse
y de ser alegre sin ser frívola;
saber conversar sin hablar demasiado;
saber amar,
sin olvidar amarse a sí misma.
Ser mujer es saber ser
una persona especial,
Transmitir luz donde hay oscuridad
Dios bendiga tu vida Mujer, amiga, madre, esposa.
Te desea de todo corazón
No hay comentarios:
Publicar un comentario